Libre comercioDesde hace varios años, la principal actividad en el campo de los Tratados de Libre Comercio implica a los países emergentes y en vías de desarrollo. En muchos casos, estos países están negociando tratados bilaterales entre sí, y ya no solo con sus vecinos más próximos, sino con socios comerciales muy alejados. De este modo, la red del comercio internacional cada vez se vuelve más tupida e interconectada, y los países más ricos pierden paulatinamente su papel de nodos concentradores e intermediarios del comercio. Algunos fenómenos relacionados son los siguientes:

  • La cada vez mayor demanda de los países emergentes, especialmente por el gran crecimiento de sus clases medias (muy notable en países como China o Brasil).
  • La consolidación de áreas de comercio independientes de los países desarrollados. Algunas de ellas son regionales, como por ejemplo el Sudeste Asiático y Pacífico, o las áreas de libre comercio latinoamericanas (Mercosur, Alianza del Pacífico). Pero otras son transoceánicas: por ejemplo, las vínculos cada vez más directos entre el Sudeste Asiático, Latinoamérica y África Subsahariana.
  • El crecimiento de los flujos de inversión entre países emergentes, movimiento dominado por China, inversor de la máxima importancia en un número creciente de mercados, pero que incluye también a otros países.
  • La ampliación del recuento de los emergentes, denominación ambigua que ya no puede referirse tan solo a los ya clásicos países BRICs, sino que debe incluir una lista mucho más amplia.

Varios ejemplos de esta tendencia los tenemos en varias noticias de acuerdos bilaterales entre países de las dos orillas del Pacífico y del Atlántico:

En otros artículos hablaremos de otros nuevos ejes del comercio internacional en pleno auge.

Fuentes citadas: AméricaEconomía, El Comercio, El Economista, La República, InfoLatam.